Nueva señalización en Valdemorillo para concienciar a los propietarios de mascotas sobre la importancia de retirar los excrementos caninos de la vía pública
Acabar con los llamados “puntos marrones” que se localizan en distintas zonasdel viario público, tanto en calles y plazas del casco urbano como en las urbanizaciones. Este es el objetivo prioritario que guía a la Concejalía de Medio Ambiente de Valdemorillo a desarrollar una nueva actuación encaminada a concienciar a los propietarios de los canes, de modo que se aseguren una conducta responsable por su parte a la hora de garantizar la necesaria retirada de los excrementos caninos de aceras y demás lugares de paso para peatones y disfrute público en general. Una medida más de sensibilización que se traduce ahora en la instalación de la nueva señalización que recuerda la prohibición que contempla la propia normativa municipal a la hora de tolerar de las defecaciones de perros en estas vías.
Hasta medio centenar de carteles son los que ya han comenzado a instalares este jueves, 21 de octubre, advirtiéndose en ellos, claramente, el coste que puede llegar a tener para el vecino el incumplimiento de lo dispuesto en la Ordenanza reguladora de la Protección y Tenencia de animales vigente en esta localidad. En concreto, el pago de multas de hasta trescientos euros, haciendo así valer una normativa que, como recalca la Concejala delegada del área, busca compatibilizar la presencia de las macotas en los espacios públicos con las debidas condiciones de limpieza y seguridad en materia de higiene que éstos deben presentar en todo momento. Precisamente para velar por el respeto a los dispuesto la citada ordenanza municipal, y para avanzar “entre todos” en la consecución de un Valdemorillo más limpio y cuidado, la propia Charo Cámara ha querido hacer un seguimiento personal de la colocación de estos carteles, cuya ubicación se ha establecido atendiendo a la importancia de poner fin a la situación que vienen registrando determinados lugares donde se observa una mayor proliferación de deposiciones caninas.
Además, y completando este nuevo intento de sensibilizar a la población sobre la problemática real que entraña el mantenimiento de conductas inadecuadas y poco cívicas por parte de algunos propietarios de animales de compañía, desde esta Concejalía se hace también un llamamiento especial para indicar la necesidad de hacer un uso responsable de los ‘toilekan’, dispensadores que forma parte del mobiliario urbano, prestando un servicio de utilidad a la hora de facilitar la recogida de estas deyecciones. Y es que, además de generar una mala imagen en la estampa urbana de Valdemorillo, la presencia de estos residuos constituye también un problema para la salud, ya que puede generar focos de transmisión de enfermedades, al margen de causar otras desagradables molestias a los viandantes.
Y como no sólo se trata de prohibir, el Ayuntamiento trabaja también en la posible habilitación de un espacio donde se garantice el espaciamiento de los distintos ejemplares caninos, de un modo ordenado y siempre respetuoso con el entorno urbano.