Klose abraza la historia frente a una maravillosa Ghana
Alemania 2-2 Ghana
Nueva antología al fútbol, y ya van unas cuantas en este magnífico Mundial, la vivida ayer entre Alemania y Ghana. El conjunto teutón, tras destrozar a Portugal, tuvo en los africanos un hueso muy duro de roer. Porque Ghana ha presentado las credenciales como mejor selección africana del torneo gracias a un fútbol dinámico y vistoso.
Apoyados sobre un mediocampo rocoso y solvente, Ghana, gracias a dos cohetes como son Atsu y Asamoah desnudó las carencias de dos centrales exiliados en los costados como son Boateng y Howedes. Si Löw no remedia ese agujero en ambas bandas, Alemania puede sufrir más de una avería durante el torneo.
Con un ritmo anodino, quizás fruto de un clima asfixiante, Ghana entendió que no podía repetir el error del partido inaugural, y se mantuvo paciente a la espera de soltar algún aguijonazo.
A pesar de que el resultado no se movió durante la primera parte, el partido desprendía el olor a ese viento veraniego antes de una gran tormenta…y así fue.
En 20 minutos absolutamente maravillosos, un huracán de fútbol total aterrizó en Brasil.
Golpeó primero Mario Götze tras un churro en el que demostró el genial mediapunta que la cabeza la tiene para pensar. No se preocupen, todos los goles valen igual.
El gol alemán fue contestado por Ayew, quien puso el empate tras comerle la tostada a Mustafi.
Agigantada Ghana, Muntari generó el 1-2 prácticamente él solito. Robó un balón tras una salida cándida de Alemania, encontró el espacio, y asistió a Asamoah Gyan para ejecutar a Neuer. En medio de la locura, sorprendentemente, reinaba Ghana.
Restando media hora para el final, y con desventaja en el marcador, había interés en saber cómo iba a responder Alemania el primer gran contratiempo del torneo. Pero no dio tiempo a despejar esas incógnitas, ya que Miroslav Klose, esa clase de jugadores que son un 7 en su club y casi un 10 en su selección, puso las tablas en el marcador tras un gol de su factoría. Córner, peinada y hay un tipo que aparece en el segundo palo. ¿Saben quién rondaba ese segundo palo? Sí, el de siempre, Klose.
Ese gol ratonero, de puro 9, sirvió al germano para igualar a, pónganse en pie, Ronaldo Nazario como máximo anotador histórico de los Mundiales. 15 goles y todo un torneo por delante. ¿Lo superará? Debería…
Volviendo al partido, tras 20 minutos a puro fuego, el choque no bajó de revoluciones ya que Alemania advertida de que no podía regalar más vidas a Ghana, se empeñó en cerrar su clasificación para octavos.
Fruto del cansancio aparecieron los espacios, pero Müller y Klose no aprovecharon sendas ocasiones, con lo que el encuentro finalizó con unas más que merecidas tablas para ambos equipos, lo cual no debió dejar insatisfecho a ninguno de los 2 entrenadores.
A Löw porque Alemania extrajo varias lecciones de la emboscada ghanesa, ya que aterrizó en el mundo de los mortales y concluyó que necesita laterales de nivel si quiere hacer algo serio en el torneo.
Por su parte, Appiah, técnico ghanés, salió vivo de lo que parecía ser un paseo al matadero alemán, mantiene a Ghana en el torneo y, sobre todo, limpió la imagen de un conjunto que pecó de pardillo en su primer partido frente a Estados Unidos.
El grupo cierra su segunda jornada esta madrugada con el choque entre Portugal y norteamericanos.
Alejandro Briega