Hoy me rindo
Levanta las manos y se nos cae el corazón, pero dos minutos después ya se nos ha olvidado. Esta niña siria se rindió ante la cámara creyendo que se trataba de un arma ¿Qué clase de mierda de mundo es este? O mejor dicho, ¿qué clase de mierda de personas somos que consentimos que nuestro mundo sea este?, ¿cómo somos capaces de aguantar en un mundo en el que una niña vive con el miedo a morir en su piel cada instante de su corta y dura vida? Ayer mataron a 5 mujeres en menos de 24 horas en España. Mujeres que seguramente vivían con el mismo miedo que esta pequeña. ¿Cómo se puede vivir pensando cada día que puede ser el último?
Pero las demás personas seguimos con nuestro camino, lo dicho, se nos encoge el corazón por un minuto, pensamos en lo injusto de la situación y seguimos. Pero no, no se puede seguir caminando con tranquilidad en un mundo en el que una persona tan pequeña ya se ha rendido, ¿qué no habrá visto para rendirse ya?… cuando todavía no ha vivido.
No se puede caminar tranquila en este mundo cuando el feminicidio es un hecho; cuando vivimos en una sociedad que se autodenomina avanzada, pero en la que los hombres se siguen creyendo que tienen más derechos que las mujeres por el simple hecho de “ellos ser ellos y ellas ser ellas”.
Hoy me desperté negativa y sé que mañana volveré a creer que el cambio es posible, pero hoy solo puedo pensar que, ¿y si luchar por cambiar este mundo no sirve? ¿Y si la utopía esa, que en palabras de Galeano sirve para caminar, y que yo tanto defiendo en realidad no sirve? No me gusta este mundo, levanto mis manos, hoy me rindo. Este mundo no sé cómo cambiarlo, que me den otro.