El mundo mirará a Leo
Antes de que comience a rodar la pelota, el grupo F se presume como una zona con un claro favorito: la Argentina. Irán, Bosnia y Nigeria, a priori, pelearán por el segundo lugar que los deposite en los octavos de final.
Y no es para menos el favoritismo que la prensa y el mundo del fútbol en general tienen con la Argentina. Hace 28 años que no sale campeón del mundo, hace 2 mundiales consecutivos que no puede pasar la barrera de los cuartos de final y encima tiene a uno de los mejores jugadores del mundo: Lionel Messi. Además de una delantera de lujo, el equipo argentino tiene un mediocampo con mucho juego y con futbolistas de primer nivel que se destacaron en la última temporada en el fútbol español, Javier Mascherano y Ángel Di María son los que tendrán que darle ese equilibrio que tanto necesita el conjunto de Alejandro Sabella. Del medio hacia adelante, Argentina es un arma mortal. El fútbol nace en el primer pase de Fernando Gago y se distribuye con ingenio a los 4 de arriba: Di María, Agüero, Messi e Higuain. Además posee buenas variantes en la delantera si algo no funciona bien. Rodrigo Palacio y Ezequiel Lavezzi ya demostraron cuando les tocó ingresar que están a la altura de las circunstancias.
Pero no todas son buenas para el equipo sudamericano. La defensa es el gran problema y el cual Sabella no pudo resolver desde que asumió allá por 2011. Al utilizar un esquema tan ofensivo se producen lógicos desequilibrios. Si además a esto se le suma que el arquero Sergio Romero no es titular en el Mónaco, los inconvenientes se multiplican.
Uno de los equipos que buscará sorprender a la Argentina y que será su primer rival es Bosnia. El equipo dirigido por Safet Susic intentará que su primer Mundial sea inolvidable y para ello basara su juego en sus dos máximas figuras, Edin Dzeko y Miralem Pjanic. Los actuales jugadores del Manchester City y Roma, respectivamente, son los nombres más conocidos que tiene una selección que clasificó cómodamente las eliminatorias con 8 victorias, 1 empate y una derrota. La gran virtud que posee el equipo es que se adaptan a la perfección con 2 sistemas: se defienden con un 4-4-2 y se despliegan para atacar con un 3-5-2, el cual es el que mejor le sienta.
El déficit que puede llegar a tener Bosnia es que debutará en una Copa del Mundo y eso siempre implica tener una presión extra. Además, aunque son ordenados para defenderse, mostraron varias fisuras en el amistoso contra Argentina, el año pasado.
Para Irán el gran objetivo que tiene para la Copa del Mundo es pelear por el segundo puesto. Con algunas figuras jóvenes que juegan en Europa, los dirigidos por Carlos Queiroz apuntan a realizar un papel digno.
En las eliminatorias, no tuvo grandes problemas para poder clasificar al Mundial, ganó 8 partidos, empató 4 y apenas perdió 2. Terminó primero en su grupo por delante de países como Corea del Sur y Uzbekistán. Su juego se basa en el poder ofensivo que poseen, Jahanbakhsh, jugador del Nijmegen de Holanda, es la nueva joya del futbol Iraní y el volante Nekounam es el patrón del equipo.
El principal inconveniente que tiene Irán es la fragilidad defensiva y eso si no lo mejora será un pecado cuando tengan que enfrentar a delanteros tan poderosos. Un dato más: nunca pasaron la primera ronda de un Mundial.
El último equipo que enfrentará a Argentina en la primera ronda será Nigeria. Los africanos son un viejo conocido de los sudamericanos ya que se verán las caras por cuarta vez en 20 años. Las tres anteriores fueron victorias para el conjunto que tiene como capitán a Lionel Messi: 2 a 1 en Estados Unidos 1994, 1 a 0 en Corea-Japón 2002 y 1 a 0 en Sudáfrica 2010.
Sin dudas el gran fuerte que poseen los nigerianos es la velocidad cuando salen de contraataque. Además son aguerridos en la mitad de la cancha y el entrenador Keshi fortificó su mentalidad ganadora desde que asumió. Sus grandes figuras son el volante del Chelsea John Obi Mikel y el delantero del Liverpool Víctor Moses.
Por otro lado, aún muestran la debilidad defensiva que los caracteriza desde su irrupción en los primeros planos. También dan ventajas en el retroceso y muestran dificultades para defender el juego aéreo en pelotas paradas.
Nicolás Amato / @nicolasamato1