Claves para cuidar los neumáticos y ahorrar combustible
CN/ AFANE
Mantener los neumáticos en perfecto estado para una mayor seguridad y evitar el derroche de combustible, es algo muy a tener en cuenta y debería de servir para concienciar a la población en un aspecto clave para evitar incidentes. Elegir bien el neumático y mantenerlo en buen estado es imprescindible para ahorrar combustible y garantizar nuestra seguridad y la de los demás. Además, saber cómo afecta el estado de los neumáticos al gasto en combustible nunca antes había sido tan importante para nuestros bolsillos, ya que en estos días de vuelta a la rutina en septiembre los que el precio del combustible marcan de nuevo récords diarios.
El mantenimiento adecuado de los neumáticos contribuye a aumentar considerablemente nuestra tranquilidad. El hecho de no reemplazar neumáticos gastados o dañados, por las prisas o por pereza, pueden tener consecuencias graves en cuanto a la seguridad.
Para un ahorro de gasolina es indispensable tener los neumáticos en buen estado. Algunos de los consejos a seguir para lograr un buen mantenimiento de los neumáticos son:
– Comprobar la presión de la rueda
Esta revisión se debe realizar siempre con los neumáticos en frío para lograr las mejores prestaciones del vehículo. Esto se debe hacer de vez en cuando para una mejor conducción en nuestro día a día, y siempre antes de un largo trayecto. Hay que tener en cuenta que la presión ideal va en función de cada vehículo, pero también influyen otros factores como el número de pasajeros, la velocidad media, el tiempo, o el equipaje.
– Chequear el dibujo y desgaste del neumático
Especialmente tras los meses verano, pues el calor puede hacer que el asfalto alcance unas temperaturas de hasta 70ºC. Lo que hace que el desgaste del neumático aumente. Y nunca olvidar de que cualquier vehículo que circule con una profundidad del dibujo inferior a 1,6 mm, no solo carece de las garantías de seguridad necesarias, sino que legalmente no está habilitado para transitar por la carretera.
– Circular con el paralelo incorrecto
Circular con el paralelo del vehículo en mal estado acelera el desgaste de los neumáticos sin que en muchos casos el conductor se percate. Algunas de sus consecuencias son un desgaste mayor e irregular, frenadas menos efectivas, mayor ruido de rodadura y aumento de las vibraciones en la conducción, y por lo tanto, mayor gasto de combustible.
Escoger el neumático que nuestro vehículo necesita
Para conseguir una mayor eficiencia del combustible con los neumáticos también hay que ser selectivo a la hora de comprar y optar por el modelo más adecuado. La etiqueta del neumático nos ofrece información útil sobre la sostenibilidad y la eficiencia energética del modelo elegido. Dependiendo de los materiales, dibujo y compuesto del neumático, el gasto en combustible puede ser menor. Ser consciente en el momento de la elección de neumático permitirá ahorrar a los consumidores europeos hasta 2.800 millones de euros al año en combustible, según el servicio de Estudios del Parlamento Europeo.
Es más, en el caso de los motores térmicos, el uso de neumáticos eficiente y con un mantenimiento óptimo, conllevará un ahorro en combustible y por lo tanto una disminución de las emisiones de CO2. Y en el caso de los vehículos eléctricos el ahorro resultará en un aumento de la autonomía del vehículo.
Apuesta por una conducción eficiente
La conducción también hará que se gaste más o menos dinero a la hora de repostar. Para no despilfarrar lo primero que se debe hacer es arrancar el motor del coche sin pisar el acelerador. En los motores de gasolina se puede comenzar a circular justo después del arranque, mientras que en los de diésel se debe esperar unos segundos. Además, hay que intentar mantener la velocidad lo más uniforme posible, evitando frenar, acelerar y cambiar de marcha si no es necesario.
Para economizar la gasolina es preferible usar el aire acondicionado a bajar las ventanillas si tienes calor. Otro consejo es conducir con la marcha más larga y evitar revolucionar el motor, si se puede. Aprovecha las bajadas para ahorrar en el consumo de combustible, y en las subidas, retrasa al máximo la reducción de marcha, incrementando ligeramente la presión sobre el acelerador.