Real Madrid 1-1 Villarreal: La desidia motiva la Liga

El Real Madrid no consiguió pasar del empate (1-1) ante un gran Villarreal en el partido correspondiente a la jornada 25 de la Liga BBVA, un choque en el que los blancos lo intentaron todo sobre el césped del Santiago Bernabéu pero no fueron capaces de llevarse los tres puntos, con lo que ven acercarse a dos puntos al FC Barcelona.

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El equipo madridista realizó un gran partido pero no consiguió mantener la distancia con el FC Barcelona y aprovechar el empate del Atleti en Sevilla. El Villarreal realizó un perfecto encuentro ante el líder de la competición y sacó un punto que sabe a oro de uno de los campos más complicados de Primera. Al Madrid le faltó combinar y enlazar las jugadas para llegar al gol, tanto que sólo llegó penalti.

Los de Marcelino García Toral alargan su buena sintonía tras el pase a octavos de la Europa League ante el Salzburgo y puntúan merecidamente en el Bernabéu. Le dificultó el trabajo en todo momento al conjunto local y consiguió tapar a Isco, desaparecido prácticamente durante el tiempo que jugó, y a Benzema que pasó de puntillas por el partido.

Salió el Madrid con la idea de adueñarse del esférico conocedor del buen juego combinativo de su rival. Con las líneas avanzadas y presionando en campo rival el equipo blanco procuró dominar desde el primer minuto. Rondando el minuto diez, gracias a un saque de esquina, los de Carlo Ancelotti acercaron el peligro a la portería defendida por Asenjo aunque sin fortuna. En la siguiente acción el club de Castellón demostró que no había venido a pasearse a Chamartín y obligó a Casillas primero y a Carvajal después, a evitar el primer gol de la noche.

Después del susto inicial los merengues continuaron con su particular monólogo avisados de la velocidad de los hombres de arriba del Villarreal. Así, se cumplió la media hora con un Madrid que no cejaba en su empeño y siguió insistiendo en una posesión que por el momento no daba frutos. La ocasión más clara de la primera mitad la tuvo el central Raphael Varane, otra vez a balón parado, pero el francés no acertó en su remate. Una oportunidad la del galo que vino sucedida por otro nuevo acercamiento de los madridistas que parecía rondaban el gol.

Al final, sin goles acabó una primera parte que se desarrolló principalmente en el centro del campo con un Madrid queriendo y teniendo el balón ante un Villarreal dispuesto a entregarle la responsabilidad de atacar conscientes de la necesidad merengue de conquistar los tres puntos para recuperar la ventaja con respecto al Barça. Los equipos se marcharon a vestuarios con la sensación de poder haber anotado al menos un gol pero con los deberes por hacer en los segundos 45 minutos.

El regreso de vestuarios trajo a un Madrid más directo. Lavado de imagen que se reflejó en los primeros compases de la segunda parte. Benzema robaba un balón en el círculo central y le cedía el balón a Cristiano que cruzó su disparo pero se encontró con la manopla de Asenjo. En la siguiente jugada el luso volvería a ser el protagonista. El central castellonense Bailly agarró al actual Balón de Oro dentro del área provocando un claro penalti que transformaría el siete del Madrid para poner por delante a su equipo.

Pareció crecerse el cuadro de Ancelotti, que aprovechando la inercia del gol, volvió a plantarse en la meta contraria hasta en dos ocasiones. Primero Ronaldo se topó con el guardameta Asenjo en un mano a mano y después Bale mandó alto un disparo desde la frontal. El tanto encajado pareció anestesiar a un Villarreal que con un cuarto de hora disputado en el segundo periodo dio entrada a Vietto y Manu Trigueros.

Sustituciones con las que acertó Marcelino ya que apenas tres minutos después de la entrada en el campo de sus dos jugadores el Villarreal logró igualar el partido. La primera aparición de Vietto provocó una indecisión en la zaga madridista de la que se aprovechó Gerard, que superó a Casillas con un gran zurdazo. Así, volvía todo a su lugar de origen y con la necesidad del Madrid de seguir remando para no dejar escapar los puntos del Bernabéu.

A raíz del empate Cristiano se echó el equipo a sus espaldas y tuvo la oportunidad de firmar un doblete. Lo intentó el delantero primero con una buena carrera por la banda pero el portugués se volvería a encontrar con Asenjo y a continuación un centro medido de Bale acabaría con una bonita parada del portero. Sería el argentino Vietto, omnipresente desde su entrada en el terreno de juego, quien volviese a asustar a un Bernabeú, que se impacientaba con sus jugadores. Una afición que la tomó con su entrenador al cambiar a Isco, un tanto desaparecido, por Illarramendi.

En los últimos cinco minutos el partido se rompió y ambos equipos buscaron el gol. Jesé desaprovechó una mala salida de Asenjo y acto seguido Casillas evitó el segundo del Villarreal con una gran estirada a un disparo de Vietto. Vertiginosos últimos compases en los que el Madrid se volcó con la portería del cuadro castellonense pero en los que no logró el tanto de la victoria. Así, el Barcelona vuelve a estar a tiro del líder, dos puntos, y el defensor del título, el Atleti, a siete.

Darío Novo