La Comunidad de Madrid dota con la última tecnología para el tratamiento del ictus al Hospital Gregorio Marañón
La Comunidad de Madrid ha invertido 1,5 millones de euros en la nueva área de Neurorradiología del Hospital Gregorio Marañón, donde ha instalado un angiógrafo y un TAC de última generación, que convierten a este centro sanitario en uno de los hospitales punteros en España para el tratamiento del ictus.
El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha visitado la sección de Neurorradiología donde está emplazada esta tecnología de máximo nivel, en un espacio de 460 metros cuadrados completamente renovados y con acceso directo desde el área de urgencias al igual que desde la calle Doctor Esquerdo, para facilitar el acceso de los pacientes.
El angiógrafo biplano es el sistema más avanzado para el diagnóstico y tratamiento del ictus, aneurismas y malformaciones arteriovenosas cerebrales, todo ello usando una mínima dosis de radiación. Además, este equipo cuenta con herramientas para la navegación tridimensional que permiten el tratamiento de lesiones cerebrales de forma mínimamente invasiva, a través de una punción en la ingle o carótida, sin necesidad de abrir el cráneo del paciente. Esta es una ventaja que minimiza el riesgo de complicaciones y que mejora significativamente las condiciones de seguridad en el diagnóstico y tratamiento endovascular de esas patologías.
Este sistema biplano, además, permite al neurorradiólogo obtener dos imágenes simultáneas, en planos perpendiculares, ganando en seguridad y precisión, y reduciendo el tiempo de intervención.
Por su parte, el equipo TAC para el diagnóstico de estas patologías está dotado de exclusivas y novedosas herramientas para el análisis de pacientes de Código Ictus, que permiten medir y comparar la falta de flujo sanguíneo al cerebro durante estos episodios. Además, se trata de tecnología con ultra baja dosis radiológica, lo que consigue hasta un 82% de reducción de radiación ionizante al paciente. Asimismo, multiplica por cuatro la velocidad en la realización de los estudios radiológicos. También se ha ampliado el espesor del cerebro que se puede estudiar. Por tanto se ahorra tiempo, imprescindible en estos casos urgentes, se cuenta con mayor campo cerebral de estudio y se reduce el impacto radiológico sobre el paciente.
CENTRO DE REFERENCIA El Hospital Gregorio Marañón es uno de los centros que más ictus atiende al año en toda España, con una media superior a los 700 pacientes, y que forma parte de la red de centros del Código Ictus de la Comunidad de Madrid, tanto en adultos como en niños.