Muere la duquesa de Alba
La aristócrata Cayetana Fitz-James Stuart y Silva, XVIII duquesa de Alba, XI duquesa de Berwick y catorce veces Grande de España, ha muerto este jueves en el Palacio de las Dueñas, su residencia en Sevilla a los 88 años de edad.
La Duquesa ha fallecido este jueves, tras pasar sus últimos momentos rodeada de su actual marido Alfonso Díez, de sus seis hijos, además de sus nietos y amigos, que han ido llegando al Palacio de Dueñas, donde se encontraba desde que fuera trasladada «por expreso deseo de la paciente y de sus familiares» desde el Hospital Quirón Sagrado Corazón de la capital andaluza, donde la Duquesa fue ingresada el pasado domingo en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en situación de insuficiencia respiratoria secundaria a neumonía de la comunidad, asociada con arritmia cardiaca y repercusión hemodinámica.
Una vez en Dueñas y hasta su fallecimiento, Cayetana Fitz-James Stuart ha recibido atención médica por parte del equipo de profesionales que la ha atendido durante su permanencia en el Hospital Quirón Sagrado Corazón, así como por el equipo de médicos y de enfermería que venían atendiéndola hasta su ingreso.
En estos momentos, se están llevando a cabo los preparativos propios en esta situación, como la adecuación de la capilla ardiente que quedará instalada en el Salón Colón de la Casa Consistorial hispalense, el espacio más amplio del Ayuntamiento donde habitualmente se celebran los plenos municipales y principales eventos.
Mientras tanto, el Palacio de las Dueñas permanece rodeado por multitud de periodistas de distintos medios de comunicación, además de por curiosos y vecinos que acuden para interesarse por el estado de la Duquesa.
Paralelamente, las redes sociales han comenzado ya a volcarse con la noticia, siendo uno de los primeros el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, quien a través de una entrada en su perfil de Twitter manifestaba su pesar, dejando clara la vinculación que la aristócrata siempre ha tenido con la capital de Andalucía. «Siempre llevó a Sevilla en el corazón y por eso permanecerá para siempre en el corazón de Sevilla», agregaba.