Cifuentes apuesta por “una Administración, una competencia” para evitar duplicidades
Cristina Cifuentes ha apostado por el modelo una Administración, una competencia en la nueva etapa de la Federación de Municipios de Madrid (FMM), organismo que representa a las 179 localidades madrileñas y que el pasado miércoles celebraron su IV Pleno. Una etapa en la que la presidenta espera que quede reflejado lo que los ciudadanos han querido tras las últimas elecciones, que es el respeto de las mayorías nacidas de las urnas.
Cifuentes, durante la inauguración del Pleno, quiso recordar la señalada fecha en la que se celebra, el Día Internacional contra la Violencia de Género, Tras rendir homenaje a las 48 mujeres asesinadas en lo que va de año en España, tres de ellas en la región, y transmitir el cariño a sus familias e hijos ha reclamado sumar esfuerzos para erradicar esta lacra.
La presidenta se refirió a los logros alcanzados por la FMM para mejorar la vida de los ciudadanos a lo largo de sus 30 años de historia, y ha agradecido el trabajo desarrollado por los Comités Ejecutivos y sus presidentes.
Compromiso del Gobierno regional con el municipalismo
Tras recordar el compromiso del Ejecutivo autonómico con el municipalismo, reflejado tanto en el programa electoral, como en el hecho de que miembros de su Gobierno procedan del ámbito municipal, repasó algunas de las iniciativas vinculadas con la FMM. Entre ellas, el convenio para prestar asesoramiento y asistencia técnica a los municipios el gasto de 34,2 millones para financiar los 2.059 agentes que conforman las BESCAM (Brigadas Especiales de Seguridad de la Comunidad de Madrid), la finalización del actual Plan PRISMA o el inicio del un nuevo plan de inversiones con una implicación más directa en su gestión de los ayuntamientos.
La presidenta manifestó que se abre una nueva etapa, y ha apelado a la colaboración, el diálogo y la lealtad institucional entre administraciones y ha pedido para la nueva etapa de la FMM se anteponga siempre el interés general de los ciudadanos, se tengan en cuenta las inquietudes y demandas y se respete la pluralidad de una sociedad como la madrileña